Según Maduro, la decisión responde a un compromiso directo con el presidente Gustavo Petro para consolidar la operatividad de Monómeros en territorio colombiano. El ministro de Minas y Energía de Colombia, Edwin Palma, corroboró que las negociaciones avanzan bajo un acuerdo de confidencialidad y que en los próximos días realizará una visita a las instalaciones de la empresa para evaluar su estado real, ya que existen versiones contradictorias sobre su condición actual. A pesar de la voluntad política de ambos gobiernos, la operación enfrenta obstáculos significativos. Monómeros figura en la lista de entidades sancionadas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) de Estados Unidos, por lo que cualquier compraventa requiere una licencia de esta entidad. El gobierno colombiano ya ha iniciado gestiones diplomáticas en Washington para obtener dicha aprobación, argumentando que se trata de un asunto de seguridad alimentaria. El valor de la transacción aún no es oficial, pero estimaciones preliminares lo sitúan cerca de los 350 millones de dólares. Ecopetrol figura como un posible comprador por parte de Colombia, aunque su participación formal no ha sido confirmada.
