Sin embargo, la iniciativa ha encontrado un amplio rechazo desde múltiples frentes.

Gremios como la ANDI y Fenalco, exministros de Hacienda como José Antonio Ocampo y José Manuel Restrepo, y una mayoría de congresistas la consideran inoportuna, innecesaria e inviable. El argumento principal de los críticos es que el problema de fondo no es la falta de ingresos, sino el "derroche de gasto" y la falta de austeridad del Gobierno. Bruce Mac Master, presidente de la ANDI, afirmó que es "probablemente el proyecto que más va a afectar a las familias colombianas". Por su parte, el expresidente César Gaviria la calificó como un intento de "ahogar con más impuestos a los trabajadores y a las empresas, con el único propósito de financiar pretensiones burocráticas y clientelistas".

Ante la falta de ambiente político, especialmente en un año preelectoral, muchos analistas consideran que la reforma parece "diseñada para que no se apruebe", lo que podría ser una estrategia del Ejecutivo para justificar la expedición del presupuesto por decreto.