Sin embargo, esta visión es rebatida por actores de la industria. Gabriel García, CEO de Páramo Presenta, una de las principales promotoras de conciertos del país, afirmó que “la gente que compra boletas por $500.000 es un montón de gente de clase media, no solo de clase alta”. García advirtió que el sobrecosto deberá ser trasladado al público, lo que podría llevar a que las empresas dejen de organizar algunos eventos y se enfoquen solo en “apuestas más seguras”.

Esto podría reducir la oferta cultural y la competitividad de Colombia frente a otros mercados de la región, como Chile, para atraer giras de artistas internacionales.