La oposición, liderada por el Centro Democrático, ha calificado la iniciativa como “fiscalmente insostenible”. Incluso congresistas de partidos independientes o de gobierno, como Angélica Lozano, han advertido que el presupuesto está “inflado y desfinanciado” y que el gobierno podría estar buscando que el Congreso rechace el proyecto para luego expedirlo por decreto. Desde el oficialismo, la representante Tamara Argote ha defendido la necesidad de la reforma para cubrir el hueco fiscal del país. Este precedente, sumado a la fallida tributaria de 2024, reduce las posibilidades de éxito del actual proyecto.