Adicionalmente, se contempla un ajuste al alza en el impuesto al consumo para estos productos y para el tabaco.

En el ámbito digital, la reforma apunta a gravar con IVA los juegos de suerte y azar en línea, una actividad que hasta ahora ha estado exenta.

Coljuegos habría acordado una tarifa del 19% para este sector.

Estas medidas forman parte de un paquete más amplio que también incluye un incremento en el impuesto a las ganancias ocasionales, que afectaría herencias, venta de bienes y premios de lotería, pasando del 15% al 20%. El ministro de Hacienda, Germán Ávila, ha señalado que la iniciativa busca “la disminución de externalidades negativas en materia ambiental y de salud”. Sin embargo, estas propuestas han generado debate, pues mientras el Gobierno las presenta como una forma de tributación más justa y saludable, algunos sectores advierten sobre el impacto en la industria y el riesgo de fomentar el contrabando y la informalidad si los aumentos son desproporcionados.