Este diseño lo sitúa en competencia directa con otros modelos delgados como el Motorola Edge 70. El dispositivo contará con una pantalla OLED de alta resolución y el procesador A19 Bionic, consolidándose como una opción avanzada en el segmento premium.

La adopción de la tecnología eSIM, que reemplaza la tarjeta SIM física, permite un diseño más minimalista y abre la puerta a nuevas funcionalidades como la activación remota de líneas móviles y una mayor seguridad en la gestión de datos. Hasta ahora, las regulaciones chinas exigían el uso de tarjetas físicas, lo que representaba una limitación para los modelos de Apple diseñados para un mercado global.

Con esta luz verde, se espera que el iPhone Air tenga una excelente recepción entre los consumidores chinos, quienes valoran tanto la innovación tecnológica como el diseño.

Este movimiento podría fortalecer la posición de Apple frente a fabricantes locales como Xiaomi, Huawei y Oppo.