Los conductores podrán hacer preguntas complejas y encadenar solicitudes, como “¿Hay un restaurante económico con opciones veganas en mi ruta?

¿Qué tal el parqueo allí?

Bien, vamos allá”.

La IA podrá acceder a otras aplicaciones de Google, como Calendar, para agendar eventos o crear recordatorios sin abandonar el modo de navegación. Otra mejora significativa son las indicaciones basadas en puntos de referencia visuales, utilizando datos de Street View para ofrecer instrucciones más humanas como “gira a la derecha después del edificio rojo” en lugar de distancias abstractas.

Además, la IA permitirá notificaciones de tráfico proactivas, incluso sin una ruta activa, y se integrará con Google Lens para obtener información contextual sobre lugares con solo apuntar la cámara. Paralelamente, Google ha lanzado un “Power Saving Mode” (modo de ahorro de energía) que, según la compañía, puede extender la duración de la batería hasta cuatro horas durante la navegación. Este modo simplifica la interfaz a blanco y negro, muestra solo información esencial y aprovecha las pantallas de bajo consumo.

Sin embargo, esta función estará disponible exclusivamente para la serie Pixel 10 y sus variantes, marcando una estrategia de diferenciación para el hardware de Google.