Esto incluye no solo los navegadores de escritorio y móviles, sino también interfaces integradas en plataformas de inteligencia artificial como ChatGPT Atlas. A pesar de que Pino reportó la vulnerabilidad al equipo de seguridad de Chromium, hasta el momento no se ha lanzado un parche oficial, lo que deja a miles de millones de usuarios expuestos.

Mientras tanto, los navegadores que utilizan otros motores, como Firefox (Gecko) y Safari (WebKit), no se ven afectados. Como medida de protección, los expertos recomiendan a los usuarios evitar abrir enlaces de fuentes no confiables, utilizar navegadores alternativos para sitios sospechosos e instalar extensiones que bloqueen la ejecución de JavaScript por defecto.