Por otro, Meta, su empresa matriz, confirmó haber controlado un ataque que permitía espiar a usuarios mediante un archivo malicioso.

La decisión de descontinuar el soporte para teléfonos más antiguos, que incluye modelos como el Moto G de primera generación, Nexus 4 y varios dispositivos de las series Xperia y Optimus, responde a la necesidad de la plataforma de evolucionar. La incorporación de funciones avanzadas, como herramientas de inteligencia artificial y protocolos de seguridad más robustos, exige un hardware y software que estos equipos ya no pueden soportar. Esta medida busca garantizar un funcionamiento estable y seguro para la mayoría de su base de usuarios. Paralelamente, la compañía emitió una alerta sobre una vulnerabilidad de tipo “zero-click”, en la que el simple hecho de recibir un archivo manipulado en un chat era suficiente para instalar un software espía, sin necesidad de que la víctima abriera el archivo o interactuara con él. Aunque Meta aseguró que el ataque fue controlado y afectó a menos de 200 personas a nivel global —principalmente activistas y periodistas—, el incidente subraya la importancia de mantener tanto la aplicación como el sistema operativo del dispositivo actualizados para protegerse de amenazas emergentes.