Esta nueva política busca cerrar la brecha histórica con Apple y extender significativamente la vida útil de los dispositivos. Durante años, el ecosistema Android ha sido criticado por su fragmentación y la lentitud en la distribución de actualizaciones, especialmente en dispositivos de gama media y baja que a menudo quedaban obsoletos tras dos ciclos de sistema operativo.
Sin embargo, esta percepción está cambiando drásticamente.
Samsung, uno de los mayores fabricantes de dispositivos Android, ha establecido un nuevo estándar en la industria al anunciar un soporte de hasta siete años, que incluye seis generaciones de actualizaciones del sistema operativo One UI y Android, además de siete años de parches de seguridad, incluso para modelos de gama media como el Galaxy A56. Este compromiso no solo mejora la propuesta de valor para el consumidor, sino que también responde a una creciente demanda por productos tecnológicos más sostenibles y duraderos.
Esta transformación ha sido posible gracias a la colaboración con socios estratégicos.
Qualcomm anunció a principios de 2025 que su nuevo procesador, el Snapdragon 8 Elite, permitirá a los fabricantes ofrecer hasta ocho años de actualizaciones completas, abarcando tanto el sistema operativo como la seguridad. Este avance no será exclusivo de los teléfonos Pixel de Google, sino que estará disponible para marcas como Samsung y Xiaomi, lo que sugiere que el soporte extendido se convertirá en una norma en la gama alta de Android. Para el usuario, esto se traduce en una mayor vida útil para su inversión, una protección más prolongada contra amenazas de seguridad y acceso a nuevas funcionalidades durante más tiempo, posicionando a los dispositivos Android como una alternativa competitiva y de largo plazo frente al ecosistema de Apple.