Esta situación es un reflejo del deterioro generalizado del sistema sanitario del país.

Por otro lado, la lucha por los derechos humanos ha llegado hasta el Vaticano.

Familiares y activistas protestaron en Roma con fotografías de más de 800 presos políticos, exigiendo su liberación bajo la consigna #CanonizaciónSinPresosPolíticos. La manifestación se realizó en vísperas de la canonización de dos venezolanos, el médico José Gregorio Hernández y la madre Carmen Rendiles, aprovechando la atención mediática internacional para denunciar la situación de los prisioneros del régimen. Estos casos se suman a las denuncias de pobreza extrema, que afecta al 90% de los hogares, y una inseguridad alimentaria que sufre el 80% de la población, según un artículo de opinión.