Por otro lado, un gran número de líderes democráticos aplaudió la decisión.

Expresidentes colombianos como Juan Manuel Santos, Iván Duque y Álvaro Uribe elogiaron la “valentía” y “perseverancia” de Machado. El presidente de Argentina, Javier Milei, la felicitó por su “enorme lucha por la defensa valiente de la LIBERTAD”.

El expresidente de Estados Unidos, Barack Obama, también celebró el galardón, describiendo a Machado como un “ejemplo a seguir”. En contraste, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, emitió un mensaje ambiguo, expresando: “De María Corina espero que ayude a que su país consiga el diálogo para mantener la paz”. Esta diversidad de posturas subraya cómo el Nobel a Machado no solo es un reconocimiento a su figura, sino también un catalizador que expone las diferentes alineaciones políticas frente al régimen de Maduro y la lucha por la democracia en Venezuela.