José Gregorio Hernández (1864-1919), conocido como el “médico de los pobres”, es venerado desde hace más de un siglo por su caridad y su dedicación a atender a los más necesitados sin cobrarles, e incluso dándoles dinero para sus medicinas. Fundador de la Academia Nacional de Medicina en Venezuela, su vida combinó la ciencia y una profunda fe. Fue beatificado en 2021 por el papa Francisco, tras reconocerse el milagro de la recuperación de una niña que había recibido un disparo en la cabeza. Por su parte, Carmen Rendiles (1903-1977) fundó la Congregación de las Siervas de Jesús, superando una discapacidad física desde su nacimiento.
La canonización fue recibida con gran emoción tanto en el Vaticano, con la presencia de peregrinos venezolanos, como en Caracas, donde los fieles siguieron la transmisión. En la víspera de la ceremonia, manifestantes venezolanos en Roma exigieron la liberación de los presos políticos en su país, un llamado respaldado por la Conferencia Episcopal Venezolana.













